PERDONAR

PERDONAR

El perdón es sanador. ¿porqué? pues ¿quién es el que sufre y se enferma cuando no puede perdonar? ¿cuando tiene un resentimiento, un rencor o una culpa hacia alguien? . Tú mismo.      Tal vez la otra persona ni sabe que tú le guardas rencor, tal vez ya se olvidó del incidente, y tú sufriendo todavía. ¿Qué hay que no merezca ser perdonado? ¿Te crees muy importante como para perdonar o ceder? ¿Qué te hicieron o qué hiciste que no puedas, revisándolo y  adquiriendo esa sabiduría, perdonarlo y continuar tu vida?    Jesús perdonó en la Cruz.  Nadie es más grande que Él. Él dijo: ´´Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen´´ Claro, estaban dormidos como lo está todavía la mayor parte de la humanidad. Después de 2.000 años y aún no se ha entendido de lo que se trata.   Es la prepotencia, el orgullo, la culpa, la rabia, la vergüenza, el resentimiento, el odio, lo que ha mantenido a la humanidad  en   esta oscuridad.  Esta es la causa de guerras, asesinatos, robos, exterminios, dictaduras, es el afán de poder, de querer siempre tener la razón y de creerse más grande y poderoso que los demás.     Todavía no se ha entendido que todos somos iguales, creados y unidos por el Espíritu que es Uno solo,  que en la Revisión en la Luz, cuando desencarnamos, lo que será visto allí , será el bien y el mal que hicimos y en qué nos convertimos  y el orgullo no será bien visto, tendrás que regresar una y otra vez, hasta que logres dejarlo atrás  y aprender a ser humilde, sólo así  avanzas de nivel y te sanas a tí mismo.

El no perdonar es una carga tan pesada, que no te deja elevar.  ¿Y para qué quieres esa carga?  Ya  suéltala, perdona y olvida.  Ya no tengas esos sentimientos tan feos  que roban tu energía, te enferman, te opacan tu Aura, te pesan y no dejan entrar la Luz. ¿Vale la pena? Creo que no.   Que  alguien te hizo algo en tu niñez o adolescencia , y cuántos años han pasado?  Hasta cuándo esa carga tan pesada? Ya suéltala.     Y  no tienes que ir hasta esa persona a pedir perdón o a perdonarla tú, no,  eso lo haces tú contigo.  Entra a tu mente y tu corazón y allí revísalo,  busca  la   sabiduría que te deja esa situación,  y ya suéltala, déjala ir, que no te importen los demás, sólo  lo que sientes tú . liberación. Nada importa más que eso. Sentirte libre como la mariposa.

Pregúntate: Para qué sucedió ésto?  ¿Para qué? no el porqué, el porqué pueden ser miles de razones, pero el para qué , te da la sabiduría, el aprendizaje de lo acontecido. Qué aprendí de eso? Qué cambios hubo en mí o en mi situación general?  Qué entendimiento nuevo tengo después  que pasó?  Quién soy ahora de diferente?  En qué cambió mi vida? Respóndete con honestidad, no te guardes nada ni te engañes a tí mismo.

Cuando lo entiendas verás que tonto eras con ese sentimiento que sólo te estaba obstaculizando  tu progreso, tu salud, tu paz, tu alegría y tu evolución. Verás que no valía la pena y que no te merecías vivir con esa carga sobre tus hombros.

Y a fin de cuentas, ahora entendemos que no hay nada que perdonar, que esas experiencias  eran necesarias en tu vida para alguna lección que debías aprender,  o una actitud que cambiar, o una deuda que pagar o quién sabe.  Sólo el Alma lo sabe.

TODO  ES APRENDIZAJE Y EVOLUCION.